PASO DE Nª SRA DE LOS DOLORES
En 1.956, la Hermandad de Nª Sra. de los Dolores prestaba generosamente la Imagen de la Virgen de los Dolores de San Francisco para que nos acompañara en el desfile procesional de la Semana Santa de ese año, tradición que mantendría durante todos los años sucesivos y que motivó que en 1.988 se fusionaran ambas Hermandades.
La Imagen de la Virgen que actualmente procesiona no es la misma que lo hacía los Viernes de Dolores en los años anteriores a la Guerra Civil. Durante la contienda, esta Imagen fue destruída, por lo que se decidió adquirir una nueva. Se acudió a "Alsina, artículos religiosos" (Madrid), donde se adquiriría la nueva Imagen que, junto con un manto que le regaló Dª Elia Raboso, volvería a procesionar por las calles de Alcázar de San Juan.
Ya en 1.990, se procedió a la restauración de la Imagen por parte de los RR.PP. Franciscanos Manuel Prieto y Arsenio Muñoz, y para el año siguiente se le confecciona, por parte de las Religiosas Concepcionistas de Alcázar, un manto para procesionar, en color granate.
Fue en 1.994 cuando la Junta decidió, a la vez que organizar nuevamente la procesión del Viernes de Dolores, que el Paso fuera portado a costal, atendiendo al deseo manifiesto de aquellos jóvenes que en años anteriores habían portado el Paso del Cristo de la Paciencia. Para ello, se tuvo que realizar una nueva mesa para el Paso (realizada por el ya fallecido Pedro Hervás) y se compró tela para un manto negro de brocado, el cuál sería cortado y confeccionado por las propias mujeres de la Junta, dirigidas por Rosina Pradillo.
Visto el resultado de ese año, se decide para el próximo que la Virgen también sería portada a costal el Jueves Santo, pero la mesa resulta ser demasiado pequeña, por lo que en 1996 se decide adquirir un nuevo trono para la Virgen. Será al año siguiente cuando se encargue a los talleres "Orobio de la Torre", de Torralba de Calatrava, la construcción de los respiraderos y la peana, mientras que la nueva mesa sería elaborada por los propios miembros de la Junta. El Sábado de Dolores de 1.998 pudo verse por fin a la Virgen en su nuevo trono.
En 2.001, se da el primer paso para la finalización del trono de la Virgen de los Dolores. Se trata de la decisión de ponerle un palio al Paso, para lo cuál se visitan diversos talleres de bordados, y será finalmente a Francisco José Perales, de Leganés, a quien se le encargue el bordado de dicho palio, mientras que a los talleres "Aragón & Pineda, orfébres" (Motril, Granada) se les encargaría la elaboración de doce varales en plata repujada, con ornamentos en su parte central y con basamentos cuadrados con escenas de la vida de Jesús. También se le encargarían seis cetros, en plata y madera, ocho ánforas y ocho violeteros. Aunque la parte frontal del palio bordado se recibió en 2.002, no sería hasta la Semana Santa de 2.003 cuando se pudo ver a la Dolorosa bajo su nuevo palio, el cuál ya tiene los laterales, con crestería sin bordar; la trasera, bordada con apliques en oro, con crestería; la delantera, bordada con apliques en oro y el escudo de la cofradía, terminada en una corona de pedrería; y el techo, con un aplique en oro de una paloma en el centro.
Fotos del Paso de Nª Sra. de los Dolores
(Pinche sobre la imagen que desee para verla ampliada)
